Hace 35 años, sucedió algo que cambió por completo la vida de muchos mexicanos, incluido un servidor.
TERREMOTO DEL 85
Yo en aquél entonces tenía tan sólo 4 años, mis padres trabajaban en la SHCP: mi papá en la Federal Norte y mi madre en la Sur, cerca de Xochimilco.
Como todas las mañanas, nos despedimos en Pino Suárez, porque de ahí salían unas combis directas al trabajo de mi mamá, por cierto, yo iba a la guardería.
Como siempre, iba haciendo berrinche por algo, ya sea porque quería un dulce o simplemente porque me despedía de mi papá. Como sea, recuerdo que ibamos todos tranquilos cuando de repente el chofer se detiene a media avenida Tlalpan y dice:
«Hasta aquí llegamos»
Nunca me enteré, hasta ahora, de qué tan ciertas pudieron haber sido sus palabras porque literalmente, se abrió la tierra a mis pies. Fue algo sumamente aterrador.
Recuerdo que mi madre me cargó como pudo y corría a un lugar más seguro [Imagínense la escena: chorrocientosmil cristianos corriendo despavoridos sin rumbo fijo] y en el viaje, recuerdo haber visto como la gente de la desesperación, se arrojaba por las ventanas de sus departamentos de los edificios altos, sin contar con la lluvia de vidrios que nos caían en la cabeza.
Hubo muchísimos muertos, dolor y pena, por eso, hoy quiero darle gracias a la vida, a Dios y a mi Madre, el que hoy sigo con vida.
¿Ustedes cómo lo vivieron?
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